Line Up
James Labrie: Vocals
John Petrucci: Guitars
John Myung: Bass
Jordan Rudess: Keyboards
Mike Mangini: Drums
Tracklist
01. On The Backs Of Angels
02. Build Me Up, Break Me Down
03. Lost Not Forgotten
04. This Is The Life
05. Bridges In The Sky
06. Outcry
07. Far From Heaven
08. Breaking All Illusions
09. Beneath The Surface
Me declaro, antes que nada, ferviente admirador de la banda, desde que los descubrí una madrugada en el video clip de "Pull me Under" de la añorada "Headbanger's Ball" de la MTV. Desde entonces sigo todos sus trabajos, y una vez que supe de la salida del grupo de Mike Portnoy primero, y la salida también de éste disco, después, me propuse, antes de su escucha, valorar dos cosas fundamentales: qué dirección tomaría el grupo, una vez despojado de uno de sus pilares más que fundamentales (John Petrucci es el otro, al menos a nivel compositivo), y justamente cómo ocuparía Mike Mangini el lugar dejado a las baquetas por Portnoy y qué aportaría al grupo musicalmente hablando.
Personalmente creo que una vez salió al mercado en 1999 "Metropolis Part 2: Scenes From A Memory", una obra maestra absoluta conceptual, y viniendo desde discos excelentes a muy buenos ("Images & Words", "Awake", "Falling Into Infinity"), el grupo dió un giro hacia el sonido casi trash en "Six Degrees of Inner Turbulence" y "Train of Thought", transformando sus temas en duración hacia una cada vez más prolongada, y llegando, con "Octavarium" y "Systematic Chaos", a un equilibrio entre esos factores progresivos-melódicos-trasheros (muy a lo Metallica modernos)-sinfónicos. Su último trabajo de 2009, "Black Clouds & Silver Linings", posiblemente recogió frutos de la depuración de todo lo anteriormente citado, para ser uno de los más vendidos y aclamados de la banda.
Y entonces se va Portnoy. Y toca sacar nuevo trabajo. Y Petrucci con Jordan Rudess se componen todo el material, y las partes de batería... pues las programamos en una caja de ritmos, ya vendrá el batería que creamos adecuado y adaptará su estilo a lo que necesitemos (parece ser que efectivamente, Mangini ya se encontró el disco hecho, y desde el punto de vista compositivo, cero patatero ha aportado). Y LaBrie añade sus particulares líneas vocales, como siempre. Y tenemos los resultados.
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| De izquierda a derecha: Mike Mangini, John Myung, James Labrie, Jordan Rudess, John Petrucci |
Dream Theater han preferido optar por el conservadurismo musical frente a la posibilidad de innovación que suponía la marcha de su barbudo batería fundador en éste primer trabajo sin él. Algo para mí un tanto decepcionante, si tenemos en cuenta que creo que aún pueden dar más cosas nuevas a la música. Pero quizás por el temor a que un giro demasiado brusco coincidiendo con la fuga de su batería les hiciera perder apoyos de sus fans, han dejado la empresa para otro momento.
La portada muy atractiva, como siempre con éste grupo, y el título del CD, deliberadamente por supuesto, a mí no me engañan, es un "dramático giro de los acontecimientos", haciendo referencia a la marcha de Portnoy. Una vez puesto en marcha el CD, y escuchado al menos una docena de veces de cabo a rabo uno hace sus valoraciones.
Musicalmente, éste disco es muy similar al citado Black Clouds: temas largos, muy maduros y compensados entre el virtuosismo técnico y la melodía progresiva, con muy, muy escasos arranques "trash metal" (claramente Mike Portnoy era quien más influía en esa vertiente), donde Petrucci y Rudess han tirado de oficio y han hecho brillar en la producción mucho más a John Myung al bajo (¡excelente!), y curiosamente han bajado el volumen en las mezclas a la batería. Llama la atención claramente, como el anterior golpeteo incesante de Portnoy queda ahora más apagado en manos de Mangini, siendo éste un zurrador de los parches demostrado. Le dará igual, estará encantado de conocerse por haber fichado por los Dream, no ha tenido oportunidad de colaborar en el disco más allá de un batería de sesión... total, no iba a protestar por unas mezclas finales que no le dejan brillar, pero está claro que éste tío es muchiiiiiiiiiisimo más de lo que el CD deja escuchar, y si no, ya se verá en directo la bestia parda que es.
Un poco frío me ha dejado James Labrie, que si bien ha estado absolutamente correcto, no se ha matado a trabajar precisamente. Las dos baladas del disco son quizás lo mejor en cuánto a su aportación se refiere, quedando relajado y cumplidor sin más en el resto de temas. Me fastidia porque éste igualmente sabe hacer las cosas mucho mejor, pero ya estoy acostumbrado a su labor maniaco-depresiva en cada x discos; es un músico de rachas. Finalmente, y volviendo al principio, hablar sobre Petrucci y Rudess. Lo dicho, madurez compositiva y virtuosismo cada uno en su instrumento, llevando el peso de la banda ahora que no está el barbas de la batería, pero... por ésta vez, y sin que sirva de precedente, han unido madurez con conservadurismo. No hay ni un sólo tema que innove nada en la trayectoria dilatada de los de New York, ni atisbo serio de intentarlo. Como dije al principio, igual les daba canguelo.
Pasando a tratar uno por uno los cortes del CD (lo tenéis para descarga en versión Limitada abajo del todo), abre el mismo "On The Back Of Angels", primer single y videoclip (que podéis ver más abajo), un muy buen tema, que engancha más cuanto más lo escuchas, típico de los Dream Theater más clásicos y progresivo-melódicos, que bien podía haber sido incluído en el "Image & Words", con su regustillo a "déja vu" en discos previos del grupo. Le sigue "Build Me Up, Break Me Down", con un inicio y estructura semi-psicodélica, sobre una base digamos trashera muy maquillada, para cabalgar por una melodía marca de la casa, y terminar en unos arreglos orquestales que empalman en el siguiente tema, "Lost Not Forgotten", propios del teclista de "Cradle of Filth". Correcto pero sin aportar nada nuevo bajo el sol progresivo. Sobre éste último, decir que es un delirio semi-instrumental de esos que nos tiene accostumbrados de vez en cuando éste grupo, rápido, quizás el que más del trabajo, con un interesante surtido de cambios de ritmo y riffs de guitarra (incluso demasiado apabullante, me temo), y un estribillo y trabajo de batería de Mangini super potente. De lo mejor del disco, posiblemente.
Tras ella, desembocamos en lo mejor de éste disco para mi gusto, "This Is The Life". Un tema en la línea de los últimos trabajos, 100% escuela progresiva, repitiendo el núcleo central que planea por distintos puntos del CD, llevándolo a su clímax, pero sin extenderse en longitud ni complejidad innecesarios, como en otros temas ocurre (las ya clásicas "pajas" instrumentales propias de los Dream). Delicioso.
"Bridges In The Sky" le sigue con un inicio declaradamente tribal y de teclados y ambiente a lo Cradle Of Filth (¡otra vez!), dando paso a un "recuerdo a Portnoy" de trash maquillado estilo progresivo, que se hace demasiado largo a la escucha y algo aburrido en el estribillo, dando fe a aquello de "lo bueno si breve...". Un buen tema, de cualquier modo. "Outcry" es quizás la apuesta más atrevida del CD, dentro de la ya declarada quietud musical de la obra, con toques y ambientación psicodélico-funkeros, que se funden en una línea propia del grupo. Curioso pero fallido, finalmente.
Las dos baladas ("Far From Heaven" y "Beneath The Surface") que flanquean al último tema multiinstrumental, son a cual más bonita y sentida, chapeau aquí para Labrie, no sabría con cual quedarme de las dos. Y entre medias, "Breaking All Illusions", con como 100 cambios de ritmo y melodías y dos horas por lo menos de duración (a mi se me hizo así de larga), momentos muy bellos de la mano maestra de Petrucci al solo de guitarra, y al fin y a la postre compendio de lo que es y será éste grupo; por otro lado, totalmente innecesaria, visto que no tienen nada que demostrar... de lo más flojito del disco.
Por ser obra superprofesional y trabajada, parida en momento crítico de la historia musical de los de New York, pase y llévese el diagnóstico ajustado de 3 estrellas y media; la media porque para PROGRESAR hay que ARRIESGAR, y no han tenido el arrojo de intentarlo.
Que tomen nota.
Valoración diagnóstica
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